Trocitos de vida ...

Estaba fijándome en lo sorprendente que es la vida a veces... El cómo pasa el tiempo desde que estás caminando por las calles junto a tus amigos, o tu familia, o la persona que más quieres en este mundo, hasta cuando estamos sentados y parados mirando el paso del tiempo.

Pienso que no somos nada, que nuestras etapas de la vida son como trocitos que la conforman enteramente, como si de los cimientos de un edificio que representa nuestra historia se trataran; desde que nacemos y vamos avanzando, hasta que por circunstancias que únicamente lo sabe el destino, esos "cimientos" que hemos ido poniendo poquito a poco en aquel edificio, dejan de seguir construyéndose, y quedan estancados en el recuerdo de que estuvimos ahí, y dejamos nuestra historia anclada en el planeta.

Somos estrellas que un día quedarán latentes en el firmamento, y dejarán huella de alguna manera en cada uno de los que nos recuerden el día de mañana; quizás nuestros hijos, nietos, o simplemente, personas cercanas a nosotros...

Como dice Drexler "Somos polvo de estrellas", es decir, que al igual que nacemos tras surgir de aquel polvo de estrellas, al marcharnos, dejamos en cada uno de nuestros seres cercanos con cierto polvo esparcido en cada uno de ellos. La vida tiene sus altibajos, pero por eso es vida; es un sendero que a veces caminamos acompañados, y otras veces, únicamente con nuestro cuerpo y alma...

Fijáos qué variopinta que es la vida, a veces rozas las nubes de felicidad y otras, el subsuelo tras caer en la tristeza más profunda . 

Pensad en cómo es cada una de vuestras vidas y paráos a reflexionar en lo que somos y más tarde llegaremos a ser. 

Ana.