La voz de las palabras .#

Todos nacemos con nuestra forma de amar, nadie nos enseña qué debemos y no debemos elegir, simplemente, es la vida misma la que nos muestra enseñanzas que nosotros decidimos tomar o dejar pasar. Nos alimentamos de la experiencia para avanzar día a día, para aprender a caminar con una mirada más lúcida para no volver a hacernos daño.  ¿Ganamos? Claro que ganamos con la experiencia, aunque parezca que las enseñanzas no sirven para nada, al contrario, sirven, pero sólo si nosotros las sabemos aplicar.  ¿Sabéis? En esta vida nos vamos a topar con muchísimas personas, yo por ejemplo no niego que he conocido gente buena y no tan buena, pues no me gusta distinguir radicalmente entre bueno y malo. Por ahora, a una semana de cumplir dos décadas en esta vida, he podido empezar a sacar conclusiones y a clasificar tipos de personas que me he ido encontrando en la vida.  1. El buenazo: Este tipo de persona es el que siempre va a estar contigo y que cuando necesites su man...

" ¿Qué puedes hacer cuando tu "bien" no es lo suficientemente bueno, Cuando todo lo que tocas se desmorona? Porque mis mejores intenciones siguen liando las cosas. Quiero sólo arreglarlo de algún modo. Pero, ¿cuántas veces necesitare? Oh, ¿cuántas veces necesitaré yo para Hacerlo bien, Hacerlo bien? "   Así dice el estribillo de una de las canciones con las que más me identifico. Get It Right, de Lea Michele es una canción de las que te ponen los vellos de punta, porque todos sabemos que alguna vez en nuestras vidas hemos tenido la necesidad de querer hacer todo perfecto por quienes nos importan, y al final, hemos acabado solos, preguntándonos el por qué nos merecemos esto, el qué es lo que hace falta para hacerlo todo bien y ser felices de una jodida vez. Nacemos con el riesgo de perder en esta vida: de enamorarnos y por una gilipollez o un mal comportamiento perder a la persona que es y sigue en el fondo siendo nuestro todo y mucho más, de perder a tu mejor ...

Como todos sabemos la vida dicen que es como una ruleta rusa: nunca sabes lo que te va a tocar, lo que sí sabes es que sea lo que fuere que te toque vivir, ha de servirte para aprender a mejorar como persona y no para autodestruirse poco a poco. Pero hay veces-como me está ocurriendo a mí-en las que, después de tantos desengaños, te entran ganas de dejar de luchar y mandar lejos las ganas de seguir siendo como eres. En este caso es totalmente aplicable el decir que la gente cambia por las circunstancias y que la experiencia no va de la mano con la edad, sino que los sucesos a lo largo de tu vida van a ir haciéndote cambiar constantemente. Cuando alguien nos hace daño, muchísimo o poquísimo daño, hay veces en las que somos personas demasiado inocentes y bondadosas que ponemos la otra mejilla y perdonamos una y otra vez porque llegamos a querer tanto a esa persona/esas personas que no nos importa lo que nos hagan, porque siempre estar...

Hola!! Hoy vengo después de mes y algo a compartir algo que un amigo mío escribió y quería que subiera a mi blog. La verdad, nunca antes pensé en postear algo que no fuera mío en este blog, pero puesto que la verdad el pensamiento es demasiado bueno, pues he decidido hacerlo por él y por mí. Gracias por estar siempre ahí Lu , eres un gran amigo, con ese texto me inspiraste a salir hacia adelante cuando hace meses me faltaron fuerzas, y puedes llegar lejos si sigues escribiendo como lo haces :) Espero que les guste ^^ AMR ~ 11.6.2014 <3 Tú crees encontrar ese rayito de esperanza en cualquier atisbo de luz, pero no te das cuenta que si miras con otros ojos las cosas podrás encontrar de nuevo luz entre tinieblas. Crees que amar te va a salvar de la soledad, cuando hay veces quenos sumerge aun más en ésta el hacerlo. Creíste en algún momento que todo iba a ir mal, pero te equivocaste y todo fue saliendo cada vez más y más mejor. A veces crees que el odio mata al amor, cu...

En algunos momentos de nuestra vida vamos cerrando ciclos de muchas cosas, todo lo que empieza tiene que acabar de alguna forma, ¿verdad? La clave está en no sentirte culpable y saber dar las gracias por lo que aprendiste en esos momentos que viviste sola, con alguien, con algo, sea lo que fuere, hay que cerrar ciclos. Veamos un ejemplo: cuando alguien se va de nuestra vida por alguna causa ajena a nosotros, pasamos días, meses, años incluso dando vueltas en la mente pensando en si fue tu culpa incluso de que algo tuviera que terminar, llegamos a llorar, a sufrir, a querer volver el tiempo atrás para intentar evitar lo inevitable... Buscas consuelo en las personas que quieres, y todas te dan como solución lo siguiente: "Olvídalo, no merece la pena", "por favor, si tú vales muchísimo más que esa persona", "quédate con lo bueno", "sigue tu camino", y un largo etcétera que jamás termina. Aclaremos ahora: ¿Olvidar? Nunca podemos olvidar a algui...

En ocasiones, cuando más estamos relajados, somos nosotros mismos los que nos dejamos caer en la añoranza, recordar ese momento en el que fuimos felices o creímos serlo y regresar con nuestra mente a visitar al pasado. Si por una cosa nos caracterizamos los humanos es por recordar con preciso detalle cada instante que vivimos y que nos marca de por vida. Puede que ya seamos felices, que nos sintamos libres, que ya hayamos rehecho nuestra vida con otras personas que sí decidieron quedarse para siempre, o no, a nuestro lado. Es hermoso recordar momentos divertidos, de pasión, ternura... Siempre y cuando mantengamos la firme separación entre recuerdo y obsesión por lo que ya no está, lo pasado, lo ya muerto, podremos tener estas pequeñas evasiones al pasado. A todos nos gusta recordar las peripecias que hicimos de pequeños, nuestros amigos de la infancia e incluso, el primer amor o primer logro de nuestras vidas. Incluso escuchar alguna ...